En el entorno educativo del alumno sordo o hipoacúsico debe garantizarse
que los demás conozcan su lenguaje. Este es un tema bastante controvertido por
las distintas opciones existentes, no obstante la elección pasa por un análisis
profundo de las ventajas y los inconvenientes de optar por un enfoque u otro en
cada caso concreto.
Según Torres y Santana en 2001, podemos clasificarlos del siguiente
modo:
·
Orales:
Método verbotonal y programas informáticos.
·
Oral complementado:
Palabra Complementada y Bimodal.
·
Gestuales:
Dactilología y Lengua de signos.
El enfoque elegido será el más oportuno teniendo en cuenta las
características del propio alumno y de su contexto. De todos modos, en este
blog no nos decantamos por ninguna opción, ya que las nuevas tecnologías pueden
aplicarse indistintamente a todos ellos, siempre partiendo de las necesidades
de nuestros alumnos, ya que supondrán un complemento y un recurso más que
refuerce el proceso de enseñanza-aprendizaje.
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